El Puerto de Vigo acogió el acto central de esta iniciativa promovida por Turismo de Galicia con la colaboración del Clúster.
La gastronomía es un activo importante a la hora de promocionar Galicia entre aquellos que recorren el Camino de Santiago y se sienten atraídos por las celebraciones del Año Santo Xacobeo 2021-22. Así lo ha puesto de manifiesto Écociña en el Camino, una campaña desarrollada por la Xunta de Galicia a través de Turismo de Galicia con la colaboración del Clúster Turismo de Galicia.
Las instalaciones del Puerto de Vigo han acogido el acto central de esta iniciativa, que ha servido para hacer balance y agradecer el trabajo de los establecimientos participantes. El vicepresidente primero de la Xunta y conselleiro de Presidencia, Justicia y Turismo, Alfonso Rueda, fue el encargado de presidir una jornada en la que destacó los resultados de Écociña en el Camino explicando que “consiguió el objetivo de que el Camino se convierta también en una experiencia gastronómica para el peregrino” y que el aspecto culinario “sea un atractivo más para caminar a Galicia”.
El acto celebrado en Vigo con la participación de la directora de Turismo de Galicia, Nava Castro; el presidente de la Autoridad Portuaria de Vigo, Jesús Almuíña; el presidente de la Confederación Gallega de Empresarios de Hostelería y Turismo, Cheché Real, y el presidente del Clúster Turismo de Galicia, Cesáreo Pardal, sirvió también para entregar a los responsables de los establecimientos que han participado en la campaña sendas distinciones y para anunciar que la iniciativa tendrán continuidad durante el 2022.
Rueda ha explicado que la intención de la Xunta es aprovechar la continuación de este Xacobeo bienal para seguir captando establecimientos que se sumen a la oferta gastronómica y contribuyan también a proyectar el Camino de Santiago cómo referente de la cocina de calidad y sostenible.
En las actividades realizadas hasta la fecha en el marco del programa Écociña no Camiño han participado más de un centenar de establecimientos situados en diversos puntos de las distintas rutas de peregrinación dando forma a menús autóctonos elaborados con productos de proximidad y fomentando así también la sostenibilidad y el compromiso con el entorno.