El Consorcio de Empresarios Turísticos de Sanxenxo (CETS) hizo balance positivo del conjunto de la temporada alta que termina con una ocupación media del 54%, resultado de la encuesta de ocupación realizada a los asociados en julio, agosto y primer quincena de septiembre.
El CETS hace balance ahora, cuando acaba de concluir la primera quincena de septiembre, ya que la mayor parte de sus establecimientos cierran en estos días tras haber marcado una ocupación media durante la primera quincena de septiembre del 46,30%. Un resultado lejos del 76% que alcanzó en este mismo período del año pasado pero que los empresarios de Sanxenxo valoran como bueno en el contexto de las circunstancias excepcionales en las que se ha trabajado.
“El balance general es bueno, se ha trabajado bien, si bien es cierto que cerramos la temporada con cierta sensación agridulce porque ha sido una campaña muy corta. Hemos perdido Semana Santa, puente de mayo y ahora la temporada alta ha sido más corta de lo habitual, y eso lo vamos a notar en el balance de rentabilidad anual, pero el sector ha sabido responder con profesionalidad y con celeridad, nos hemos adaptado a las circunstancias y hemos conseguido salvar un verano que se dibujaba muy complicado en junio”, explicó el presidente del CETS, Alfonso Martínez.
A pesar de ello, el presidente del CETS quiso destacar el esfuerzo del conjunto de los empresarios por mantener sus establecimientos abiertos, dándole continuidad a muchos empleos, vitales para la economía del municipio. “Hemos estado abiertos el 98% de los alojamientos, por lo que conseguir una ocupación superior al 50% con el número de plazas hoteleras que ofertamos, debemos valorarlo como un éxito”, analizó Martínez.
Gran trabajo del ayuntamiento
En este sentido el presidente del CETS destacó también la gran capacidad de adaptación y de profesionalidad demostrada por los empresarios turísticos- que supieron acometer las medidas necesarias derivadas de la COVID19- como el gran trabajo llevado a cabo por el Ayuntamiento, del que destacó el esfuerzo llevado a cabo en cuestión de puesta en marcha de medidas y protocolos, higienización, limpieza y sensibilización a través de los informadores de playa habilitados por el concello, con el objetivo de transmitir que Sanxenxo era un destino seguro, como así se ha demostrado.