El presidente del Clúster participó en Ponte da Barca en una jornada organizada por la Comunidad Intermunicipal del Alto Miño en el marco del proyecto “Frontera Olvidada Limia-Lima”.
El Clúster Turismo de Galicia ha sido una de las entidades invitadas a participar y tomar la palabra en la jornada desarrollada el martes en la localidad portuguesa de Ponte da Barca por la Comunidad Intermunicipal del Alto Miño para analizar los desafíos del desarrollo y la atracción turística en el entorno del río Limia (Lima, en el país vecino) en el marco del proyecto de cooperación transfronteriza “Frontera Olvidada Limia-Lima”.
El presidente del Clúster, Cesáreo Pardal integró el panel “Desarrollo turístico, redes turísticas y cohesión territorial”, junto a Cristina Mendes, representante de la Entidad Regional de Turismo do Porto e Norte de Portugal; Susana Ribeiro, directora general operacional de la Asociación de Turismo do Porto – Convention & Visitors Bureau, y António José Correia, coordinador de la Red de Instalaciones Náuticas de Portugal.
En su intervención Cesáreo Pardal destacó la importancia de la colaboración entre las autoridades y los distintos agentes del sector turístico de Galicia y Portugal para desarrollar la promoción conjunta del destino Galicia-Norte de Portugal y señaló que en el caso del territorio concreto del río Limia son muchos los recursos naturales, culturales y patrimoniales que pueden servir de base para estas acciones. “Un parque natural transfronterizo reconocido por la Unesco como Reserva de la Bioesfera, yacimientos arqueológicos romanos, arquitectura religiosa, playas fluviales y una amplia oferta de actividades complementarias, entre rutas de senderismo y BTT, y fiestas gastronómicas y de interés cultural”. Pero señaló también que disponer de todos estos recursos es una “condición necesaria, pero no suficiente para ser competitivos” y apuntó que “es necesario estructurar una oferta de productos turísticos adaptados a la demanda y aplicar una gestión integral involucrando a todos los agentes implicados. De ahí la importancia de configurar redes turísticas que potencien los destinos y fomenten las relaciones con otras redes a nivel regional, nacional o supranacional, como es el caso”.
Cesáreo Pardal se refirió a la experiencia en Galicia de los Geodestinos como “fórmula que potencia la puesta en valor y la promoción turística de una área geográfica, que por su proximidad y homogeneidad conforma una oferta turística diferenciada y singular” y defendió que “trabajar unidos, coordinados y cambiar el concepto de competitividad entre empresas del sector por el de concurrencia es una buena fórmula para impulsar el sector, dinamizar la economía de la zona y facilitarle al turista la amplia oferta que puede encontrar en un territorio”.
Así, destacó que la “creación de redes turísticas incrementa la disponibilidad de ciertas actividades en un destino y la creación de un producto turístico de éxito gracias a la cooperación entre empresas. Además, los integrantes de la red se benefician de la experiencia de otros miembros, favoreciendo los procesos de innovación de las pequeñas y medianas empresas turísticas, lo que contribuye al desarrollo local y regional. Esto es lo que aguardamos de este Proyecto Frontera Olvidada Río Limia-Lima, que desde luego tiene todos los elementos para consolidarse como un destino turístico de referencia”.