La Asociación Galega de Albergues Privados (Agalber) demanda a la Xunta y a los Ayuntamientos por los que transcurre el Camino de Santiago que tomen medidas para regular las viviendas de uso turístico.
La asociación, que tiene al sarriano Pedro Xosé Quintana como secretario, asegura que “existen más de 9.000 inmuebles” dedicados a viviendas turísticas y que se dieron de alta “más de 500 el último mes en nuestra comunidad”. Añade que debido a esta situación “se está reduciendo alarmantemente el número de viviendas para alquilar”, afirmando que por tal motivo “los concellos no crecen”, además de ser una “competencia desleal” para el sector de alojamiento en el Camino.
Como solución, Agalber pide que se “apliquen criterios más estrictos y de calidad” por parte de la Xunta de Galicia y de los Concellos. Sostiene que es “un sector que no está profesionalizado en absoluto, con nulas garantías para los usuarios de estos alojamientos”. A ello, la entidad de albergues suma “el progresivo malestar de las comunidades de vecinos, estigmatizando al peregrino hasta límites peligrosos”.
Por otra parte, la asociación ha mostrado su “preocupación por el descenso de peregrinos en este 2019 en todo el Camino Francés” basándose en datos de los hosteleros. Según Agalber, las cifras de ocupación en los establecimientos por el Camino Francés son “sensiblemente más bajas”, con un 10% menos respecto a 2018.
Comentan en su comunicado que la administración “ha de promocionar y hacer campañas de todas las rutas”, subrayando que “la vía con mayor número de peregrinos ha de ser también cuidada y estar presente en las acciones gubernamentales”.